martes, 17 de noviembre de 2015

PETROCARIBE: Una espada política disfrazada de escudo integracionista



 En algunos períodos de su etapa democrática Venezuela tuvo una política exterior para CentroAmérica y el Caribe diseñada con el doble propósito de ayudar económicamente a estos países y de aumentar su influencia política en la región.  Este fue el caso de la primera presidencia de Carlos Andrés Pérez, 1974-1979, durante la cual se creó lo que sería el prototipo para PetroCaribe, el Acuerdo de Puerto Ordaz, en 1975, para el suministro subsidiado de hidrocarburos a los países de la región, así como el Proyecto de Cooperación con el Caribe, fuente de becas y de proyectos bilaterales de cooperación técnica.  El Acuerdo de San José, en 1980, vendría a reforzar el de Puerto Ordaz, en lo referente al suministro de petróleo en condiciones especiales a países de la región con insuficiente capacidad de pago. Este acuerdo estuvo suscrito por Venezuela y México, no fue una iniciativa unilateral venezolana.  
Durante la presidencia de Hugo Chávez Frías, 1999-2013 esta relación siguió un patrón similar pero exacerbado, tanto en la cuantía de los suministros y de los subsidios como en la intención de utilizar ese programa como una herramienta geopolítica para la captación de lealtades a lo que se llamó el Socialismo del Siglo XXI. Como tal PetroCaribe es un intento de exportar la llamada Revolución Bolivariana, intento que se ha estancado pero que ha sido la razón fundamental para la creación de PetroCaribe y ALBA,  ambos organismos financiados por el Estado Venezolano.
PETROCARIBE.
Eta organización fue creada en Junio de 2005, durante el apogeo del  incremento en los precios del petróleo, lo cual le proporcionó al estado venezolano los más cuantiosos ingresos de la historia. La primera reunión celebrada en Puerto La Cruz, Venezuela, contó con la asistencia de 14 países, los cuales suscribieron un Acuerdo de Cooperación Energética. Este acuerdo fue definido como una “iniciativa política para impulsar la integración sobre la base de la complementariedad… dentro del pleno respeto a la soberanía, la diversidad y necesidades de cada país”. Esta relación de respeto a la soberanía de cada país culminó, sin embargo, en la formación de un bloque de los países favorecidos por Venezuela para apoyarla en el seno de los organismos multilaterales, hasta el punto de lograr que la OEA siempre se negara a actuar en su contra a pesar de violaciones comprobadas a los derechos humanos llevadas a cabo por el gobierno.
PetroCaribe representó un cambio en la relación de Venezuela con los países del Sur, bajo el mismo esquema de la Alternativa Bolivariana para Los Pueblos de América, ALBA, una relación en la cual el petróleo se convirtió en la moneda con del estado Venezolano para comprar la adhesión política de los países miembros. PetroCaribe y ALBA no son organismos de ayuda incondicional o de condicionalidad limitada sino de total condicionalidad política, al menos en su intención. Decimos esto último porque dentro de ambos organismos existen componentes de tutelaje político que han logrado lo que parecía imposible, es decir, que uno de los países favorecidos por Venezuela, Cuba, se haya convertido en el actor político dominante en ambas organizaciones, en lugar de estar subordinado políticamente al estado benefactor.  
En la visión de sus creadores y de sus asesores cubanos  la creación de PetroCaribe debe verse como un “poderoso estímulo a la integración solidaria de América Latina y el Caribe, en contraposición con instrumentos colonialistas como el Acuerdo de Libre Comercio para las Américas (ALCA) que pondría el último clavo al grillete de la esclavitud de la América, mientras que el ALBA y PetroCaribe constituyen una fuerza liberadora y multiplicadora de energías, la única capaz de conducirla al desarrollo con soberanía, autodeterminación y dignidad”,  ver: http://www.ecured.cu/index.php/Petrocaribe#cite_note-6
Esta es una perspectiva tan política como pudiera ser económica y hemos visto como en la práctica las organizaciones ALBA y PetroCaribe toman posturas que efectivamente intervienen en la escena política de la región. Representan componentes de una armazón ideológica que pretende terminar con lo que llaman el imperialismo y colonialismo de las grandes potencias.
Sus miembros admiten que PetroCaribe es bastante más que un convenio de suministro de petróleo subsidiado, es una iniciativa política que pretende comprar lealtades al precio de condiciones muy atractivas para los países beneficiados, aunque han probado ser muy lesivas para Venezuela. Por ejemplo, en su segunda versión, los términos de PetroCaribe permiten un financiamiento de hasta el 40% de la factura petrolera, extienden el período de gracia a dos años y el período de pago a 25 años, reducen el interés al 1% si el precio del barril supera los $40 y extienden el período de pago del 60% de la factura a 90 días. Además, Venezuela acepta que parte del pago se realice en bienes y servicios.
Estas condiciones han dado origen a grandes pérdidas para la nación venezolana y  a un gran nivel de corrupción. El colapso financiero del gobierno venezolano lo ha obligado a aceptar el pago de deudas de dos de los países miembros de Petrocaribe  a un 40% de su valor, lo cual ha representado una enorme pérdida para Venezuela. Al menos una de las empresas mixtas creadas bajo la sombrilla de PetroCaribe, ALBANISA (Venezuela-Nicaragua) se ha constituido en una empresa muy corrupta, tal como lo ha revelado un estudio hecho por investigadores Nicaragüenses, ver:   http://lasarmasdecoronel.blogspot.com/2015/06/informe-especial-la-corrupcion-de.html . Allí digo: “ALBANISA fue el vehículo creado en 2007 para llevar a cabo una transferencia de millones de dólares que eran del pueblo venezolano del bolsillo de Chávez al bolsillo de Ortega. El mecanismo fue el envío de unos 10 millones de barriles de petróleo al año por parte de Venezuela hacia Nicaragua. Este envío se hacía y se hace en base a un subsidio gigantesco mediante el cual la mitad de la factura se pagaría en 23 años, con dos años de gracia y un interés de un 2%. Es decir, un regalo. Este dinero equivalente a la mitad de la factura quedaba en manos del régimen sandinista. Pocos meses después se modificó el convenio para darle al régimen un 25% de la factura totalmente gratis, ya no era necesario pagarla.  
¿Cómo se apoderó Ortega del dinero?  A través de la Cooperativa Sandinista Caja Rural Nacional, CARUNA, entidad que llegó a administrar casi 600 millones de dólares que eran de Venezuela, sin dar cuentas. El esquema de la transferencia fue modificado nuevamente para que CARUNA asumiera el total del dinero como préstamo para obras sociales y proyectos sin fines de lucro”.
Otra muestra de corrupción en el uso que se le dado a PetroCaribe es la represalia del Presidente Chávez al suspender los envíos de petróleo a República Dominicana por haber permitido la presencia en el país del expresidente venezolano Carlos Andrés Pérez. Lo mismo sucedió en Paraguay cuando el Presidente Lugo fue destituido por el Congreso y en Honduras, cuando el Presidente Zelaya fuese destituido por los poderes Legislativo y Judicial de ese país.

LA RELACIÓN CON CUBA
La relación de Venezuela y Cuba a través de PetroCaribe ha representado una transferencia no menor de unos $30.000 del pueblo venezolano al gobierno cubano durante los años de vigencia de la relación, la cual continúa hoy. En base a esa relación Venezuela ha financiado:
·       Un pozo exploratorio costa afuera, en la zona cubana del Golfo de México, a un costo estimado en $100 millones, con resultados negativos;
·       La remodelación de la refinería de Cienfuegos, a un costo estimado de unos $400 millones y la promesa de garantizar un préstamo chino para una nueva refinería en la isla, a un costo de unos $1400 millones;
·       El envío de unos 90-100.000 barriles diarios de petróleo a la isla, a subsidios muy altos y aceptando como pago servicios de  miles de médicos y paramédicos cubanos, entrenadores deportivos y asesores en agricultura, en asuntos militares y de identificación, presencia que le ha permitido a Cuba ejercer un nivel apreciable de tutelaje sobre actividades que afectan la soberanía del país huésped. Estos servicios son pagados por Venezuela a una tasa muy superior a la remuneración que se le da efectivamente a los que llevan a cabo la actividad, lo cual constituye una forma de explotación violatoria de sus derechos humano. Este suministro de petróleo a Cuba en los términos descritos más arriba, representan una transferencia de riqueza venezolana al gobierno Cubano estimada en unos $3500-4000 millones al año.
·       Construcción de un Centro de Almacenamiento de combustibles en matanzas, Cuba, para unos 600.000 barriles, a un costo desconocido
·       Construcción de viviendas en la isla, financiadas por Venezuela

PETRÓLEO ENVIADO AL CARIBE DESDE VENEZUELA
Según cifras oficiales del gobierno venezolano, en el período 2005-2013 Venezuela había enviado  unos 252 millones de barriles de petróleo subsidiado a los países miembros de PetroCaribe, recibiendo miles de toneladas de frijoles negros, bananas, pantalones y otros productos agrícolas o textiles como parte de pago. Para 2105 los envíos totales desde 2005 deben sobrepasar los 350 millones de barriles. Por supuesto, los países miembros tienen razones para sentirse satisfechos, no así el pueblo venezolano que ha visto cómo sus recursos son entregados con prodigalidad, por razones políticas. Las declaraciones durante las cumbres de PetroCaribe reflejan esta naturaleza política y dadivosa del organismo:
2007: “En esta III Cumbre de PETROCARIBE, debemos reafirmar que la consolidación de nuestra integración energética es tan solo un instrumento de la gran alianza política estratégica que necesitamos seguir construyendo entre todos. La utilización de la palanca energética debe permitirnos el avance hacia formas superiores de integración económica, social y política, para transformar al Caribe y a toda América Latina en un gran bloque en el escenario del mundo pluripolar que está en proceso de configuración….  De allí que no tengamos tiempo que perder. O lo hacemos ahora o no lo haremos nunca. O utilizamos el petróleo para impulsar ahora el desarrollo diversificado y conjunto de nuestras naciones, o estaremos condenados a perecer víctima de las grandes potencias”. Como se verá, el énfasis político- ideológico es pronunciado.
En 2009: Los miembros de PetroCaribe la definieron a  no solamente como un escudo de protección sino como una espada  con la cual enfrentarse a las potencias más poderosas del mundo, ver: http://www.pdvsa.com/index.php?tpl=interface.sp/design/biblioteca/readdoc.tpl.html&newsid_obj_id=7990&newsid_temas=111 , punto 8 de la Declaración de Basseterre.

 En 2013 los estados miembros de PetroCaribe  celebraron alborozados
el triunfo de la Revolución Bolivariana en los comicios electorales del pasado 14 de abril de 2013 cuando el pueblo bolivariano eligió como presidente de la República Bolivariana de Venezuela a Nicolás Maduro Moros, “lo cual garantiza la continuidad del proyecto de integración latinoamericana y caribeña”.



El próximo Jueves 19 de Noviembre, 2015 se celebrará en la OEA una reunión especial para tratar el tema: “PetroCaribe: Energía para la Unión”, con las presentaciones de la Sra. Delcy Rodríguez y del Sr. Eulogio Del Pino, representantes del gobierno venezolano. Quizás estas notas ayuden a presentar una perspectiva diferente sobre PetroCaribe a la que seguramente presentarán los señores arriba nombrados. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo que le hicieron a Venezuela estas bestias es tan malo como lo que le hizo Peron a Argentina o Castro a Cuba. Arruinaron un pais con todo para ser un paraiso. Seguro vendra alguien a decirme que los adecos y los copeyanos, pero es que lo de ahora es como comparar Sarajevo con un picnic. Ochoa Antich esta es tu obra hermano.